La escultura en el antiguo egipto se practico con admirable perfección en estatuaria y bajorelieves, conservándose millares de objetos de una y otra clase labrados en madera, marfil, en bronce (a veces dorado y con incrustaciones de oro y plata), en barro cocido y, sobre todo, en piedra que para las estatuas suele ser de gran dureza.
Los bajorrelieves egipcios se usan para inscripciones jeroglíficas, representaciones de dioses y faraones, de la vida doméstica, de faenas agrícolas o escenas de ultratumba y sobre todo para conmemorar las victorias de los faraones.
Las estatuas representan por lo general divinidades mitológicas, faraones, personajes importantes y a veces, personas sencillas ocupadas en quehaceres domésticos, en cámaras sepulcrales. Sus dimensiones varían considerablemente desde los grandes colosos de los templos de Abu Simbel que miden casi veinte metros hasta las minúsculas figurillas de tan solo algunos centímetros de longitud (generalmente, de barro cocido, barnizadas o esmaltadas).
Las esculturas y bajorrelieves se ceñían a una serie de convencionalismos, cánones o normas que se mantuvieron invariables en casi todos los periodos durante tres mil años.
Ley de la Frontalidad: Las figuras son concebidas para ser vistas de frente; son muy simétricas, como si se hubieran esculpido respecto de un eje central, siendo las dos partes muy semejantes.
En los bajorrelieves, además:
En la época de Ajenatón hubo un cambio de cánones. Las figuras se representaron tal como eran realmente, sin idealizarlas y con una cierta tendencia a humanizarlas; aparecen con cabezas alargadas, gruesas y cortas piernas y estómagos abultados. También se aproximaban más al naturalismo muchas esculturas y representaciones grabadas en las tumbas de nobles y potentados de la época.
Es la época de mayor idealización en la escultura. Las representaciones son de personajes juveniles, nunca ancianos.
"ESCULTURA DE KEFRÉN"
La Estatua sedente de Kefrén fue tallada por los escultores egipcios en un gran bloque de piedra de diorito verde con las piernas juntas entre los años 2550-2480 a. C. y se considera una de las más importantes obras del arte egipcio.
La corte se traslada a Tebas y se forman talleres, algunas escuelas siguen los modelos antiguos de Menfis y otras aportan novedades.
"CABEZA DEL FARAÓN SESOSTRIS III"
Realizado en cuarcita roja. Es faraón de la XII Dinastía. En él aparece ya una cierta expresión y caracteres más psicológicos. El rostro del faraón parece mostrar su preocupación por los problemas políticos y económicos.
De esta etapa son típicas las esculturas cubo, que muestran a una figura sedente que pliega sus piernas y apoya las rodillas en el cuerpo formando un cubo. Se llega al punto en el que hay ejemplos que solo muestran la cabeza, las manos y pies, el resto es la piedra en forma de cubo.
Es una etapa de esplendor en el arte, ahora con capital en Tebas. Se suavizan las formas y son a la vez más naturales, quizás por influencia del contacto con la cultura asiática. Los rasgos físicos cambian también debido a la mezcla de razas de los faraones con princesas asiáticas.
El tamaño de las obras se hace gigantesco en el caso de las esculturas oficiales, muy relacionado con los gustos de los faraones y sus construcciones. En las representaciones de los nobles la minuciosidad es mayor.
ESTATUA DE NEFERTiTI
La escultura representa a Nefertiti, (c. 1370 a. C. - c. 1330 a. C.), una gran reina de la dinastía XVIII de Egipto, Esposa Real de Ajenatón (Akenatón). En ella se realza su belleza, sus rasgos modernos, y aparece siempre con una ligera sonrisa. Perteneciente a la colección del Museo Egipcio de Berlín y conservado en el Neues Museum de dicha ciudad. Su ejecución se atribuye al escultor Tutmose.
“MÁSCARA DE ORO DE TUTANKAMÓN"
Su nombre original Tut-anj-Amón significa «imagen viva de Amón. Fue elaborada por los orfebres egipcios en el año 1354-1340 a. C. y se considera la pieza más conocida de todo el arte egipcio, realizada en madera cubierta por láminas de oro, pasta coloreada y piedras. Formaba parte del tercer ataúd del faraón, cubriendo su cabeza.